miércoles, 28 de marzo de 2012

Madre adoptiva de un día para otro

Los que me conocen, saben de mi obsesión por la libertad y mi renuencia a las ataduras y relaciones que signifiquen un "compromiso", tal vez sea una inmadurez de mi parte o no me había llegado el momento. Pero el pasado 24 de Marzo 2012 apareció en mi puerta un pequeño gatito.




Recordé que hace unos años (como quince). Un gatito llegó a mi casa pero mi mamá por razones más que nada económicas,  se negó a socorrerlo y lo tuvimos que ignorar, en el fondo siempre sentí algo de culpabilidad por eso, y sobre todo impotencia, porque yo era una estudiante y no tenía ni un peso en la bolsa.


Pues ahora, que de nuevo se puso ante mí esa oportunidad, no la iba a dejar pasar, no podría tener dos gatos vagando en mi conciencia, y lo tomé.


Tal vez parezca una tontería, pero para mí sí ha sido algo especial, ya que, por primera vez empecé a sentir lo que significa que una vida depende de tí, que necesita de mi calor porque es huérfano, que no puede valerse por sí mismo, que tengo que estar pendiente en la hora de su comida, limpiarlo, enseñarle a usar su caja de arena, etc.



Ahora me doy cuenta que Dios me ha enviado una razón más para respirar, y si sentía antes que mi vida no tenía mucha acción, ahora veo que la tiene y mucho. Esta es para mí toda una experiencia, sobre todo por el tipo de persona que soy, alérgica a los compromisos sentimentales, tal vez por eso me están poniendo a prueba, porque es probable que ese sentimiento no sea positivo.


¿A poco no está guapísimo? :)



3 comentarios:

  1. Ohhh Gaby, me encanta que le hayas abierto un blog al minino. Tus palabas me han llegado hasta las lagrimas... Y es que solamente uno puede comprender a Dios-Padre si uno tambien se vuelve padre. Es una experiencia hermosa y a la vez siempre te queda un sentimiento de perdida... Los hijos son prestados. Y los animalitos mas.. Ellos viven un tiempo mas corto pero el tiempo que viven contigo es lo mejor que te puede pasar. Bien hecho Gaby.

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  2. Se me olvido decirte que soy Mariana jejejeje

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  3. Hola Gabyta, tengo tu misma idea acerca de la libertad y los compromisos (aunque una vez leí que el "compromiso de no tener compromisos es también un compromiso") y mis hermanos trajeron a la casa hace años a un perrito, yo no lo quería y finalmente quien más lo cuidó fui yo, se convirtió en mi mejor amigo y sufrí mucho con su muerte hace un año :_(
    Los animalitos nos enseñan un buen!!!
    Una vez también leí que antes de tener un hijo tienes que cuidar algo vivo como una mascota o una planta. A mí antes hasta se me morían las plantas! :(
    pero es como un sentido de pertenencia con un ser vivo! es bonito, ese gatito es un bebé, dan mucha ternurita. Felicidades Gaby : )

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